Hace poco que tengo una heladera en casa, desde hace 15 días exactamente y en estos días he ido probando varias recetas de helados, una propia del manual de la heladera KitchenAid y otros que he ido investigando y adaptando a mis gustos. Sin duda, este se lleva el premio al más rápido, económico, rico y polifacético. Lo tendrás listo en menos de 30 minutos, los ingredientes no superarán los 5€ (comprando primeras marcas) y podrás tomarlo "al natural" o echarle todos los toppins y siropes que puedas imaginar.
Aquí va la receta:
- 4 yogures griego azucarados.
- 400 ml de nata para montar.
- 2-3 cucharadas de azúcar.
¡Ya está, solo estos tres!
Preparación:
1) 12 horas antes de hacer el helado es recomendable tener la heladera en el congelador. Yo he optado ya por tenerla siempre y así puede ser de lo más espontáneo el hacer un helado ^^.
2) 3 horas antes de hacer el helado, es importante que la nata liquida esté bien fría. Si la acabas de comprar, como he hecho yo hoy, te recomiendo que la tengas unos 15 minutos en el congelador para que monte mejor y no sea necesario tirar de azúcar a la hora de montar la nata.
3) ¡Empezamos! En nuestro bol montamos la nata, con dos cucharadas de azúcar hasta que consiga una consistencia espesa, es decir, haga picos ;). (como en la imagen). Esta vez he tenido que echar 3 cucharadas de azúcar, supongo que los 40ºC de Córdoba en pleno agosto tienen algunas consecuencias jeje.
4) Una vez que la nata esté bien montada le añadimos los cuatro yogures y batimos con las varillas hasta que la mezcla sea homogénea.
* Muchas veces leo que hay que tener cuidado de no batir demasiado porque puede ponerse mantequillosa, pero a mi personalmente nunca me ha pasado algo así, en cuanto veías que tiene textura y hace picos estará bien, al fin y al cabo, esta nata no es de relleno de un pastel así que no os preocupéis demasiado.
5) Desmontamos el bol y montamos la heladera y la ponemos a velocidad 1-2, con la heladera ya funcionando iremos echando poco a poco pero todo de una vez nuestra mezcla de helado. ¡Y a esperar! Yo lo he tenido como 20 minutos en marcha.
6) Paramos la heladera y echamos el helado en un recipiente apto para el congelador.
Recién hecho el helado está perfecto para consumir, como veis en las fotos. A mi personalmente me encanta así, porque está blandito y se derrite con facilidad y está de rechupete aunque es aconsejable tenerlo un par de horas antes de servir en el congelador, para que la textura y la presentación sea más cuidada.
Una vez el helado esté más de tres horas en el congelador empezará a solidificarse así que si lo vais a tener más de tres horas, os recomiendo que lo saquéis unos 15 minutos antes de servir para que la textura sea lo más parecida a recién hecho (aunque no será igual por desgracia, recién hecho está super cremosito).
Con respecto a esto, he leído que el azúcar invertido mejoraría la conservación del helado en el congelador e impediría que se endurezca demasiado, o que se cristalice ¡lo pienso probar! pero sinceramente, uno de los motivos por los que me gusta este helado es porque es natural, no lleva nada añadido, entonces no sé si me merecería la pena añadirle algo "preparado". Todo es probar.
Espero que os guste mucho y os animéis a hacerlo, creo que es ideal para toda la familia y muy fresquito para estos meses de calor.
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